Y es que dar un beso ayuda a mejorar el estrés y obtener satisfacción en la relación con la otra persona, tal y como revela un estudio publicado en 2009 en la revista Western Journal of Communication

Una vez que tu pareja esté receptiva a tus besos, acércate y haz más contacto fileísico. Entre las formas de hacerlo se incluyen: Envolver tus brazos alrededor de sus hombros o su cintura

Si bien se recomienda usar la lengua, es importante asegurarse de no usarla demasiado. Sería mejor si no les metieras toda la lengua en la boca. Mantenga el equilibrio.

Muchas veces los besos son espontáneos, pero no es razón suficiente para ir por la vida con los labios partidos, mal aliento o con la nariz sucia.

Un beso en los labios suele ser el aperitivo para pasar a otras instancias. Si se pone caluoroso, podría ser momento de migrar hacia el cuello de tu pareja y ver qué ocurre.

Nota: Algunas personas son cosquillosas y podrían no disfrutarlo, pero aquellos que lo hacen te lo harán saber de una forma u otra.

Una señal clara de que a tu pareja le gustan tus besos es que te bese con frecuencia y de forma espontánea. Esto significa que no solo besa cuando está en el estado de ánimo adecuado o cuando quiere algo, sino que te demuestra su afecto a través de besos en diferentes momentos del día.

Adecúate al estilo de besar de tu pareja. Parte de besar bien es poder adaptarse al estilo de besar que a tu pareja le gusta.

Siempre abogaremos por una comunicación transparente y abierta con tu pareja. No hay nada de malo en decir que te encanta morder, odias la lengua y sientes cosquillas alrededor de tu cuello. Tu pareja te lo agradecerá por no tener que descubrirlo por sí mismo..

Estas iniciativas demuestran un deseo de mantener la conexión emocional y física a través de los besos, lo que indica claramente su gusto por la forma en que lo besas.

Sólo recuerda que puede haber casos en los que probar cosas nuevas sea un poco incómodo, ¡y eso es ordinary! Es diferente y nuevo, por lo que es algo a lo que tienes que acostumbrarte. Por eso se llama práctica.

¿Has oído hablar de dedicar un pequeño porcentaje del beso, digamos el 10 por ciento, y hacer que tu pareja se corra el resto del camino?

Besar se da naturalmente en los read more humanos, ¡es por eso que lo hacemos! Practicar cómo besar antes de haber besado es como practicar andar en bicicleta en un subibaja, eso no te prepara realmente para la verdad.

Además, cerrar los ojos durante un beso es una forma de concentrarse en las sensaciones y emociones que experimenta en ese momento, lo que demuestra que está realmente conectado contigo.